Es sorprendente que aún hay muchas personas altas directivas que, por desconocimiento de su situación laboral o falta de un buen asesoramiento al respecto, no están blindadas ante posibles eventualidades.
Me sorprende porque son personas que ocupan puestos de gran responsabilidad y dedicación en sus compañías y que muchas veces, solamente se han preocupado de firmar un buen salario anual al acceder a estos cargos de dirección, sin haberse parado a pensar en una futura salida de la empresa. Creo que coincidirás conmigo en que es una realidad que ya raramente existen los puestos vitalicios y que el mercado actual de trabajo es muy dinámico. Pasamos por muchas empresas durante nuestra vida laboral. Entonces, ¿por qué no asegurarte salir de la empresa de la mejor manera posible?
Es como los pactos de socios, hay que hacerlos al inicio de la relación a poder ser, cuando aún no hay problemas a la vista. Y no significa falta de confianza, sino contemplar todas las contingencias que puedan darse y establecer unas pautas consensuadas para resolverlas.
Características de un contrato de alta dirección
Volviendo al blindaje de las personas de alta dirección. ¿Por qué es importante firmar un contrato de alta dirección? Básicamente, porque no te protege el Estatuto de los Trabajadores (salvo remisión expresa) sino el Real Decreto 1382/1985, de 1 de agosto por el que se regula la relación laboral de carácter especial del personal de alta dirección.
Esto quiere decir que, en caso de despido, no cobrarás las indemnizaciones que establece la normativa para los trabajadores comunes, sino que cobrarás una indemnización mucho menor (7 días de salario por año trabajado con un límite de 6 mensualidades). A no ser que negocies y firmes un contrato blindado donde tu empresa y tú acordéis una indemnización mayor.
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Por otra parte, el contrato de alta dirección suele contener otras cláusulas, como la de no concurrencia (durante el contrato y post contractual) o la de permanencia, por la cual se debe indemnizar a la empresa por daños y perjuicios si se abandona el puesto de trabajo antes del período fijado y por haber realizado una especialización profesional con cargo a la misma.
Otro motivo más para negociar un buen contrato blindado es que, si como personal de alta dirección formas además parte del consejo o eres una persona administradora, y mientras dure esta situación, no estarás cotizando para desempleo y, por tanto, no se tendrán en cuenta estas bases de cara a una futura prestación por desempleo. A la hora de negociar tu contrato, debes tenerlo en cuenta para establecer una indemnización mayor.
En Interalde, contamos con experiencia en el asesoramiento, negociación y redacción de contratos blindados de alta dirección. Si necesitas que te asesoremos y redactemos un buen contrato que te proteja o ya cuentas con uno, pero te gustaría revisarlo, puedes concertar una cita con nuestro equipo de laboral.